Moravia del Sudeste es famosa por su vino y sol. Las ciudades de esta área tienen mucho en común, pero aún si son bastante variadas que no se pueden “echar al mismo cesto”. La razón ya puede ser el facto que la región está situada en el encuentro de tres regiones etnográficas: Valassko, Slovacko y Hana. Moravia del Sudeste está formada por las montańas pintorescas de Moravskoslezske Beskydy y las colinas de Vsetin.
El nombre de la región Valassko viene del nombre de pastores que se establecieron aquí en el siglo 12 – los Valachs. El contacto de los pastores de las montańas y los granjeros que poblaron los valles creó unas tradiciones nacionales muy bonitas y una arquitectura tradicional impresionante formada por casas de madera que hasta hoy presenta una parte de la
tradición folclórica fuerte.
Moravia del Sudeste es la tierra de una historia rica, tesoros arquitectónicos, tradiciones folklóricas, un clima agradable, buen vino y hospitalidad. El clima suave y las cuestas del sur expuestas al sol garantizan cosechas ricas de uvas deliciosas. Desde el Riesling cultivado en alrededores de Mikulov y las colinas de Palava, la Frankovka en alrededores de Velke Pavlovice hasta la famosa variedad del Sauvignon de Znojmo, la
vinicultura significa para Moravia lo mismo como la cervecería para Bohemia.
No se sabe exactamente cuando el vino se empezó a cultivar aquí – probablemente en la época romana. Pero era el comienzo de una tradición que prosperó hasta hoy. Las tierras ricas y fértiles han atraído a muchas personas – desde los cazadores de mamuts, los Celtas, los Romanos, los Germanos hasta los Eslavos. La mezcla de culturas e influencias se traslada a la riqueza de monumentos de épocas diferentes. La tierra llegó a su colmo en la época de
l Imperio de Gran Moravia, conectada con la población de los Eslavos y la llegada del cristianismo en el siglo 9 y cuando su extensión salió lejos de las fronteras presentes. La belleza de esta tierra inspiró a generaciones de escritores, músicos, pintores y artesanos locales.
Lo común que tienen las ciudades es la localización a lo largo de valles de ríos rodeados por colinas – las colinas Vizovicke, las tierras altas de Hostyn y las montańas de las Cárpatos Blancos. Desde allí es ya muy cerca de las colinas Chriby y las montańas de Moravskoslezske Beskydy. Las sendas turísticas y ciclistas se dirigen hasta ciudades de regiones vecinas.
Actualmente las actividades de los residentes de esta región se concentran al esfuerzo de volver la vida a los sitios hermosos que atraen a los turistas de todas las partes.
Zlin es la ciudad en del centro de las colinas Valasske. La ciudad vivió su mayor desarrollo durante el principio del siglo veinte gracias a
Tomas Bata. Su fábrica familiar de zapatos, inspirada por la producción masiva de Henry Ford, pronto se hizo un líder de la producción mundial de zapatos y Zlin empezó a crecer rápidamente. Este desarrollo también afectó la arquitectura de la ciudad. Los edificios de aquella época son del estillo del funcionalismo con formas cúbicas simples repetidas de ladrillos, cristal, hierro y situados en áreas verdes.
Muy cerca de Zlin, accesible por el transporte público, se encuentra el palacio de Lesna. El palacio tiene una decoración rica de interiores.